Vuelve la democracia a Galicia, la incertidumbre se apodera del País Vasco.

A pesar del cambio de rumbo del PP, Galicia se ha dado cuenta de la nefasta gestión que ha realizado el PSOE y el BNG en la pasada legislatura. Realmente es difícil no darse cuenta de este hecho, pero habiendo asistido a la débil actuación de oposición del PP en estos últimos meses la inquietud ha permanecido hasta el día de hoy.

Es un gran día para los Gallegos y para el resto de España, el PSOE abandona el gobierno de una comunidad autónoma, eso significa que en principio, se respetará la constitución, ya no se someterá mas al pueblo ni a las doctrinas ni a los designios nacionalistas, la corruptela socialista empezará a abandonar las instituciones y por fin podremos ver de nuevo una Galicia plural, amable y generosa como lo era hace unos años.

En el País Vasco la situación es bien distinta, el PNV ha vuelto a ganar las elecciones, la segunda fuerza política es el PSOE, pobres, realmente ante este panorama da miedo vivir en aquella comunidad, entre nacionalistas radicales y socialistas supuestos progresistas, corruptos y mentirosos, apenas asoman la cabeza un par de partidos constitucionales y serios, como son el PP y UPD.

El único punto positivo que se puede sacar de lo ocurrido en el País Vasco es la posibilidad de quitarle el poder a los nacionalistas radicales del PNV, si el PSOE realmente tuviera la intención de gobernar para bien pactaría con PP y UPD un gobierno constitucional, que evitara la aniquilación del castellano, la financiacion de ETA, las subvenciones a proetarras y un largo etcétera de atentados contra la democracia que se suceden en aquella comunidad.

Por ahora quedamos expectantes ante lo que ocurra, pero mucho me temo que serán numerosos los escollos que tengan que salvar para eliminar al cáncer nacionalista que consume al País Vasco desde hace décadas.

Ojalá otras comunidades como Andalucía, Extremadura y demás socialistas tomen ejemplo de Galicia y en su día eviten seguir siendo gobernados por un partido incapaz de ganar sin corrupción, enchufismo y demás actos progres.